Suceso extraño #1

Estoy absolutamente enamorada, un enamoramiento aturdidor que se siente en la panza como algo que explotara y se volviera a constituir de inmediato.

Lo extraño es que no sé de quién.

Bueno, por el momento aprovecharé las endorfinas que mi cuerpo me regala

Te amo absurda, loca y compulsivamente



Tuve un par de semanas en las que la música no me entraba, así de raro. Me daban ganas de escuchar algo y corría a mi ipod para darme cuenta de que no me daba la gana escuchar nada, me daba hueva. Me puse muy muy triste: amo la música con locura y frenesí y de pronto me encontraba en esa horrible depresión musical. No quería bajar nada, no quería oír nada. Guácala, guácala. Tenía miedo.

Así como llegó, se fue. Hoy he estado escuchando música con el mismo entusiasmo de siempre. Con más entusiasmo, diría yo, que nunca. Recuperé lo perdido.

La música es lo mejor del universo, es perfecta, es como parte de la naturaleza: rebasa nuestra humanidad, la música siempre ha estado ahí como las piedras y las nubes. La siento tan adentro, en los cachetes cuando es alegre, entre las costillas cuando es triste, en todo el cuerpo, en la sangre como una sustancia enervante que estimulara mis sentidos, amo la música con una fuerza, con tantísima hambre, la música es lo único que me ha dejado amarla con el aferrado y afierado amor que sé dar. Ahhhh es lo mejor, es lo único del mundo.

Sonando: "Honeymoon child" con Bill Callahan

Escena de ligue anormal.

Estoy convencida que en algún lugar hay un par de guionistas de comedias gringas que se entretienen escribiendo mi vida. No sé como hacen que me pasen las cosas, pero estoy convencida que me utilizan como una especie de programa piloto de bajo presupuesto. Si les parece suficientemente gracioso lo que pasó conmigo en un par de semanas le pasará a alguna chica en una serie comiquísima que no conozco y no sigo.

La noche estaba avanzada, ya nos habían corrido de un bar, llegamos a otro. Por alguna extraña razón me sentía sociable y con intención de acercarme a algún desconocido. Yo no sé hacer esas cosas, usé un método bastante rudo.

-Hola, disculpa ¿tendrás un cigarro?
-Sí, claro.
Saca el cigarro y busca en sus bolsillos un encendedor. Su amigo me enciende el cigarrillo pues encontró antes una cajita de cerillos. En ese momento uno debería de soltar una frase ingeniosa e insinuosa, pero no, yo no sé hacer eso. Ergo me quedo parada frente a ellos fumando mi cigarro, era como si dijera: Ahora me hablan porque me hablan.

Uno de ellos me habló, era guapo y se veía interesado en mí, yo estaba muy contenta. Nos sentamos abajo de unas escaleras y empezamos a hablar.

Él: Yo me llamo Pájaro. No es el nombre que me puso mi papá, él me quiso poner (inserte aquí cualquier nombre del santoral), ese es el nombre que aparece en todos mis registros y documentos. Pero no, yo me llamo Pájaro, lo sé porque yo soy como uno de ellos.
Yo: En Buenos Aires tomé una clase de ornitología, son chidos los pájaros. (Aquí los guionistas, si la escena pasa, introducirán risas grabadas). ¿Estás estudiando aquí?
Él: No, yo vivo en el desierto, ahí tengo mi casa, vivo de autoconsumo, ahí tengo mis plantitas. Acá estoy de paso, mañana voy a Vercruz a un curso de cultivos hidropónicos.
Yo: Ha de estar chido, eso de vivir en medio del desierto y no necesitar nada que no puedas producir.
Él: Pues, no te creas, a veces, en la inmensidad del desierto uno se siente solito (risas grabadas)
En este momento, los mezcales y las cervezas se me dispararon en la sangre. Pasé de un estado de alegre y vivaracha hasta José José.
Él: Le importa si le toco el cabello.
Yo: No
Y entonces se va acercando a mí, pega su nariz a la mía. Por un lado mi cerebro me dice "primer intento, primera victoria. Es guapo" pero por el otro sólo escucho un susurro "Pájaro, pájaro!" (risas grabadas). Me decido por ignorar su segundo bautizo, no me muevo pero de pronto llega un mareo y una náusea tremenda. Invento cualquier cosa, anoto su número en el celular y salgo a vomitar a una jardinera. Voi me tiene que llevar a casa dónde me doy un baño y me meto a la cama.

Aquí termina la secuencia. Soy el piloto de una chica mucho más guapa que yo y entonces se vuelve un poco inverosímil su pésima suerte para el ligue. Pero no importa, los guionistas de verdad pasan un muy buen rato poniéndome en situaciones así.

Jean Cocteau

Nada me parece más absurdo que las citas innecesarias. Pero esta debe de ser compartida.

Opio (fragmento)
“El decir a un fumador en estado continuo de euforia que se está degradando equivale a decirle a un pedazo de mármol que está siendo deteriorado por Miguel Ángel, a un pedazo de tela que está siendo manchado por Rafael, a una hoja de papel que está siendo emborronada por Shakespere o al silencio que está siendo interrumpido por Bach.”

Jean Cocteau

Hay noches

Hay noches que parecen producto de una imaginación cansada. Que, como los sueños, se componen de fragmentos que no siempre se pueden unir porque están dislocados en el el tiempo y el espacio.

"¿Qué haces? márcame, no tengo saldo" El mensaje lo envié en un taxi que navegaba sobre la corriente. Aprteté el chaleco salvavidas contra mi cuerpo. Había algo en mis dedos huesudos que me impedía dejar de fumar.
-¿Un café? ¿Un trago?
De pronto estábamos en un bar vacío con música muy alta, pero luego se convirtió en un café sesentero y me regalaban un martini. Y luego estabamos en mi casa y bailábamos y yo estaba vestida igual que en una fotografía. El martini se había vuelto ron.

A la mañana siguiente, un mensaje en el celular me sirvió como evidencia de que a pesar de que funcionó oníricamente, la eterna noche fue real.

(absténgase, oscuro lector)

Hay un perro que me encanta, es café con blanco y me recuerda al Vagabundo de aquella cursilona película infantil. Desde que lo vi pensé en adoptarlo, en hacerme cargo de él, bañarlo, vacunarlo, llevarlo al veterinario. Hoy lo vi saliendo del departamento de un vecino: ya ni modo. La pregunta que me hago y que espero nadie me haga (absténganse, oscuros cómicos)es por qué no lo hice antes. No puedo tomar responsabilidades. Últimamente todo implica tomar grandes responsabilidades: adoptar o no un perrito, gastar diez pesos más en comprar bolsas de basura biodegradables, empezar un proyecto de solidaridad social. No me abruman, sólo me superan a veces. Me imagino que me conformaré con palmear la cabeza del perrito y darle trocitos de jamón cuando lo vea. Punto y aparte.

Hace rato sonaba Show Must Go On con la increíble e insuperable voz de Freddie Mercury, no sé si sea uno de tantos mitos que surgen en torno a las estrellas, pero tengo entendido que es la última canción que interpretó en vivo antes de morir. No quiero salir de esa idea (absténganse, oscuros sabelotodos), le da un valor único. Imagino a Mercury con sus calzones apretados y sus dientes de conejo asumiendo su muerte, haciendo de ella una canción: admirable.

Estoy contenta, me gusta salir a caminar en la tarde. Ir por las copias (Las copias cerradas), luego a las ampliaciones (las ampliaciones cerradas), que el sol me quite el frío terrible que agarré en mi helado departamento. Es como si dentro de mi hubiera un Alka-Seltzer gigante que está en efervescencia en mi barriga, en mis cachetes. Somos seres predispuestos por los medios. No sé si sea por esto, no sé si sea un gusto auténtico (absténganse, oscuros analistas) pero últimamente me alegra muchísimo ser joven. La imagen mental mía y de mis amigos yendo al cine, saliendo en la noche con las piernas enormes que levantan el polvo dispuestos a bebernos todo, a reírnos, a ser hermosos sólo porque somos jóvenes. Hermosos y Malditos, diría Fitzgerald. Hermosos y malditos y jóvenes y libres tremenda y abrumadoramente libres.

Sonando: Doginbag con The Fratellis

Primero en mucho tiempo, último del año

Hace mucho mucho que no posteaba nada, anduve en un tour sudamericano y luego volví a casa. Qué linda es la casa y el acento propio. Estoy contenta, estoy tranquila. Tengo muchas ganas de volver a Cholulita de mi corazón, caminarla, ver los diezmillonesdelugares que dejaron de existir y ver también los nuevos. Tengo ganas de ir a tomarme unos mezcales con Voi, de echarme unas caguamas en casa de Bodo con toda la banda, de ir al cine de Blockbuster con Beto (Por cierto Beto, dice mi papá que no piensa cobrarte los boletos de Radiohead ¡wiii! -perdón, es que Beto no tiene celular y no se mete a MSN y no sé cómo contactarlo-). Waa quiero llegar a una Cholula de noche que esté helada y polvorienta, quiero caminar hasta el oxxo con el estómago encogiéndose de sensación rara. Quiero ver a todos mis amigos y beber mucho con ellos y reír mucho y desvelarme mucho.

Voy a vivir sola, me emociona y me da miedo el silencio, la cama enorme, el frío. Voy a llorar mucho, voy a crecer mucho, voy a ser feliz, voy a volver voy a volver al mejor lugar sobre la tierra.

Sonando: "United States" con los Smashing Pumpkins